viernes, 8 de mayo de 2009

Neoarteria, Orgullo Argentino



La “neoarteria” es uno de los avances científicos más importantes de la medicina, y lo mejor, es nuestro. El primer "neo-vaso" fue implantado con éxito por primera vez en la historia de la medicina en Argentina, en 2005, en una cirugía a una mujer en el Instituto del Diagnóstico, por un equipo liderado por Luis De la Fuente, el cirujano vascular Sergio Garrido y el bio-ingeniero estaounidense Todd Mc Allister.

 

El conducto vascular, que fue implantado en brazos y piernas, es generado en el laboratorio con la técnica de bio-ingeniería de tejidos, a partir de células del propio organismo que no generan rechazo en el paciente, con una técnica en la que Argentina es pionera.

 

La neoarteria fue creada e implantada por primera vez en el mundo por un equipo liderado por el cardiólogo intervencionista argentino Luis de la Fuente director de cardiología intervencionista del Instituto del Diagnóstico y Maternidad Suizo Argentina. "Este procedimiento posibilita la realización de bypass (puente) en pacientes sin arterias viables, realizar implantes en quienes perdieron vasos vitales en un accidente y reemplazar arterias dañadas debido a diálisis en enfermos renales", dijo el médico.



Luis de la Fuente

 

La experiencia clínica inicial con estas "neoarterias" fue publicada en la prestigiosa revista médica "The New England Journal of Medicine", y daba cuenta del uso de estos implantes en pacientes renales; también la revista científica "The Lancet" publicó el desarrollo de la "neoarteria”. En ellos, las arterias artificiales fueron colocadas en los brazos, en reemplazo de los vasos dañados por su periódica conexión a las máquinas de diálisis.

 

La técnica que convierte células en vasos sanguíneos ya ha sido aplicada también en Polonia y en Eslovaquia (y pronto comenzará a ser utilizada en Alemania), por lo que el número total de pacientes tratados sería sensiblemente mayor.

 

"Contamos ya con la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat)  y del Incucai para utilizar esta técnica en pacientes con afección en las arterias coronarias. Recientemente hemos realizado algunos implantes en miembros inferiores, en pacientes con diabetes u otras afecciones que tienen problemas de falta de sangre en las piernas", agregó el doctor De la Fuente.

 

La experiencia fue presentada en el marco del 29° Congreso Mundial de Medicina Interna, que se realizó el año pasado en la ciudad de Buenos Aires. Esta técnica pondría fin a los injertos artificiales y le dará a los pacientes un beneficio más: las nuevas arterias serán perfectamente asimiladas por el cuerpo y no se generará rechazo ya que son genéticamente idénticas al conducto reemplazado, por tener el mismo ADN que el propio paciente.



Fuentehttp://www.intramed.net

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